Repudiamos enérgicamente el cierre del Instituto Nacional de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena
La Mesa de Organismos Nacionales de ATE Mendoza expresó su firme rechazo al desguace del Estado que sigue aplicando el Gobierno Nacional. Esta vez, contra el INAFCI (Instituto Nacional de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena), despidiendo a 900 trabajadores en todo el país, que llevan más de 30 años de trabajo en los territorios, articulando con las economías regionales de una población de 12.000 productores rurales, en la provincia de Mendoza.
El gobierno de Javier Milei avanza sobre los derechos y puestos laborales de miles de trabajadores estatales. La Asociación Trabajadores del Estado se mantiene en alerta contra los embates de un terrible ajuste que está causando mucho daño en las bases de los Organismos Nacionales.
“Tenemos compañeras y compañeros en Mendoza, como en el resto del país, que llevan entre 12 y 30 años cumpliendo funciones. En estos momentos, en la delegación provincial somos 30 trabajadores profesionales (ingenieros agrónomos, veterinarios, sociólogos, trabajadores sociales, comunicadores sociales, técnicos agrarios, contadores, entre otros), en una institución que jamás llamó a concursos, ni permitió que nuestro desempeño fuera evaluado para poder entrar a planta del Estado Nacional. Por lo que, todos estamos con contratos transitorios que no duran más de un año. Ahora, contamos con una extensión el contrato hasta el 31 de marzo, como también la tienen 70.000 trabajadores del Estado Nacional, no sólo dependientes del INAFCI, sino de todas las reparticiones nacionales”, detalló Amalia Guisasola, delegada del INAFCI en ATE Mendoza.
El malestar en las bases recrudece, ya que son 70.000 los compañeros y compañeras estatales de Organismos Nacionales que se encuentran bajo esta condición laboral precaria e informal, que vulnera su capacidad para poder asentarse y desarrollar políticas que trasciendan las gestiones gubernamentales.
“Nuestro trabajo está situado en los lugares rurales más remotos de la provincia de Mendoza. La mayoría de nosotros somos técnicos de terreno, tenemos otros compañeros que apoyan desde la cuestión de diagramación, cartillas de capacitación y difusión de nuestras tareas técnicas, con quienes acompañamos a los campesinos, agricultores familiares y comunidades de pueblos originarios, a través de proyectos de abastecimiento de agua; políticas para el agregado de valor en los territorios; generamos alternativas para que exista arraigo rural; trabajamos con políticas de género; fortalecemos cuestiones que tienen que ver con la producción de alimentos; y acompañamos a contratistas de viñas, que son los que sostienen la gran mayoría de las tareas de la vitivinicultura mendocina. A quienes nuestra institución registra, para poder reconocer su trabajo familiar y quedar exentos de tributos de corresponsabilidad gremial”, explicó la representante sindical.
Al concluir, los trabajadores confirmaron en la sede el INAFCI, con pancartas y a viva voz, que “de ninguna manera somos 900 puestos de NO trabajo”. Las mentiras que esgrimió el Gobierno Nacional para denigrar a los trabajadores y a la gran población rural que necesita de ellos para seguir subsistiendo, carece de fundamentos y responde más al severo plan de achique del Estado que llevan adelante, sin contemplar derechos, necesidades ni realidades de las comunidades que viven en el país. Frente a esto, la Mesa de Enlace de los Organismos Nacionales de ATE Mendoza permanecerá en alerta, en defensa de la dignidad de la clase obrera.