Carta abierta al pueblo de Malargüe
El Licenciado Juan Manuel Ojeda encabeza la peor gestión al frente del departamento de Malargüe, en más de 30 años de democracia.
En nombre y representación de la Comisión Administrativa de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), seccional Malargüe -ATE Seccional Malargüe-, nos dirigimos a cada malargüino y malargüina para hacerles saber que, como sindicato a lo largo de nuestra historia vimos pasar varias gestiones. Muchas de ellas malas. No obstante, podemos asegurar que la del intendente Juan Manuel Ojeda ha sido la peor, y sin dudas, la que más daño le ha hecho a la clase trabajadora municipal y al departamento en general, devastando todo a su paso.
Los empleados municipales no somos servidores políticos de la Municipalidad, tampoco aplaudidores, mendigos o pordioseros, tal cual Ojeda y sus funcionarios creen y reflejan a través del trato con los mismos. Sin ir más lejos, los contratos de servicios (locadores) o programas de inserción laboral, en realidad son trabajadores sin derechos laborales y con humillantes sueldos en negro.
Todos los trabajadores municipales somos servidores públicos imprescindibles para la sociedad, que con excelencia cumplimos el trabajo de cuidar, construir, regar, cocinar, recoger la basura, limpiar cunetas, y día a día, la cobertura de todas las demás necesidades básicas que brinda el municipio.
Como empleados tenemos el derecho a vivir dignamente sin presiones ni amenazas, con un sueldo digno y acordes a la canasta básica alimentaria, que actualmente tiene un valor de doscientos ochenta y cuatro mil pesos ($284.000,00), para una familia de cuatro (4) integrantes. ¿Cuántos municipales perciben una suma cercana a ese valor? Sólo los funcionarios políticos y algunos acomodados que, en muchos casos, ni siquiera se presentan a trabajar.
¿Alguna vez Ojeda se habrá preguntado cómo hace un trabajador o una trabajadora municipal y su familia para vivir con un ingreso mensual de pobreza o indigencia? Sospechamos que nunca se le cruzó por la mente, pese a que se jacta de ser hijo de empleados municipales.
Es por esto que repudiamos enérgicamente como el intendente Ojeda y la contadora general, Gabriela Moyano, se han burlado de la dignidad y necesidad de las familias municipales. Entienda señor intendente que no se mejora la vida del trabajador gobernando para algunos o aplicando decretos, como patrones de estancias, otorgando miserables aumentos en negro, como es el infame ítem “240 de crisis económica nacional 2022-23”, que no para todos es calculado de la misma manera.
Lo peor es que, junto a la devastación y miseria provocada por el Intendente, muchos malargüinos están sin casa, sin trabajo, o trabajan en la clandestinidad, con contratos de servicio (locación) con pagos retrasados, familias que no pueden alimentar a sus hijos como corresponde, ni pagar el costo de la educación.
Estamos convencidos que todo lo que pasa con los trabajadores municipales y con tantos malargüinos, no es casualidad. Recordemos que Ojeda en la campaña electoral del año 2019, se comprometió a cumplir muchas cosas para los empleados municipales, y lamentablemente, no cumplió con ninguna de ellas:
- Aumento salarial
- Equiparación del salario familiar por hijo, acorde a los valores de un trabajador nacional
- Condiciones laborales dignas
- Entrega de indumentaria en tiempo y forma, como está establecido en el Convenio Colectivo de Trabajo (a la fecha adeuda ropa de trabajo y calzado correspondiente al año 2021)
Vemos con creciente preocupación que a Malargüe lo están convirtiendo en un departamento totalmente abandonado, donde el abuso de poder, la arrogancia y los caprichos de este gobierno municipal, hacen que lo que soñamos y nos enorgulleció por años se desvanezca en el aire.
Es importante destacar que con la asistencia legal y gremial brindada, hemos frenado los atropellos del Intendente, sus secretarios, directores y coordinadores. En muchos casos, teniendo que revocar decretos de despidos maliciosos y en perjuicio de familias enteras, que dependen del sueldo municipal para subsistir.
Así es como ATE Seccional Malargüe, en el ámbito de la justicia laboral, ha vuelto a poner en valor y en el lugar de respeto que corresponde, los derechos pisoteados de algunos compañeros municipales.
ANTE LA FALTA DE GESTIÓN, FALSAS PROMESAS Y MENTIRAS: ¡MEMORIA Y CASTIGO!
