NO convalidaremos ningún recorte salarial y ajuste hacia los trabajadores
Compartimos nuestra posición frente a los dichos, comunicados y proyectos presentados por distintas entidades; empresarios; consejos de empresarios; uniones industriales y comerciales; legisladores; dirigentes políticos y gremiales, que plantean un ajuste en el Estado.
Frente a los dichos, comunicados y proyectos presentados por distintas entidades; empresarios; consejos de empresarios; uniones industriales y comerciales; legisladores; dirigentes políticos y gremiales, que plantean un ajuste en el Estado, desde ATE Mendoza y CTA Autónoma Mendoza expresamos que el camino para contener la pandemia emergente y salir a palear las secuelas económicas, no es precarizar más a los trabajadores privados y estatales, o recortar la canasta alimentaria de los mismos, reduciendo sus salarios.
Lo que se necesita son políticas de Estado concretas e integrales que apunten a la reactivación de los sectores, incentivando la economía interna y planteando una justa repartición de las riquezas, que hoy son concentradas en pocas manos, tanto en la provincia como en toda la Argentina.
Debemos dejar atrás el sistema basado en el capitalismo extremo que tanto daño ha causado a la clase trabajadora como a las familias más desprotegidas. Tenemos que comenzar a incorporar nuevos criterios sociales que consoliden una verdadera integración provincial y nacional de los recursos y las personas. Necesariamente, dichos criterios de orden socioeconómicos, basados en la reivindicación del trabajo y la producción, deberán ir más allá de la indiscutida reivindicación de la importancia del Estado en salud, educación, vivienda, seguridad, políticas sociales, fiscales y alimentarias de soberanía, entre otras, centradas en la lucha por la equidad contra el hambre y ocupando el rol preponderante que tendrá en la recuperación socioeconómica.
Plantear un ajuste al Estado o al salario, por distintas instituciones o sectores económicos, no es el camino para solventar las necesidades de los que menos tienen, no pone relieve la realidad que están sufriendo las pequeñas y medianas empresas, que están realizando lo imposible para subsistir, mantener su producción y fuentes de trabajo. Porque la contracara de ella son los grandes empresarios que recibieron subsidios económicos y condonaciones de deudas por miles de millones de pesos. Estos empresarios tienen que saber que es el momento de ganar menos y de distribuir correctamente la riqueza, para así poder plantear políticas en conjunto que ayuden a salir de la crisis a los pequeños comerciantes y productores, de la realidad en la que están inmersos en Mendoza.
No debemos confundir ni dejar que nos usen las clases dominantes y sus lacayos legislativos, que lo único que pretenden es seguir llenando las arcas de quienes más ganan y ganaron históricamente.
No cabe duda que la relación de funcionarios, legisladores y distintas cámaras empresariales apunta a querer ejecutar un recorte salarial. No obstante, todos sabemos que la precarización laboral no va a reactivar la economía, porque este error ya se cometió antes y la historia nos permite aprender de ello.
Lamentablemente, las distintas instituciones industriales y empresariales no están informados ni formados sobre el manejo y la estructura del Estado. Peor aún los legisladores, quienes perciben frondosos sueldos por encima de los $190.000 y tienen la liviandad de presentar atroces y cortos proyectos de precarización laboral, sin poder estar a la altura de construir propuestas sustentables sobre políticas estructurales que reactiven el trabajo y la producción.
Este corto alcance de visión de algunos legisladores oficialistas es lo que nos conduce a tener políticas cerradas y egoístas, que hoy estamos padeciendo como trabajadores y pueblo mendocino.
Quieren ajustar aún más a aquellos que están en ese 40% de pobres y sumar con recortes salariales a más de 2.500 trabajadores en negro de distintos sectores, que no alcanzan a cobrar salarios de $20.000.
También debemos mencionar a trabajadores de la Educación y de la Administración Pública que están por debajo de la canasta alimentaria, sin olvidarnos de los trabajadores Municipales que poseen un promedio salarial de entre $12.000 a $15.000 y ni siquiera llegan a subsistir con sus familias.
Esos son los verdaderos recortes que los gobiernos provinciales, municipales, las cámaras empresariales y algunos sindicatos quieren realizar con los trabajadores estatales y del sector privado, todos partes del pueblo mendocino.
Por estas razones repudiamos lo manifestado por distintas cámaras empresariales e industriales, como por aquellas marionetas políticas que quieren abrir una grieta en nuestra sociedad mendocina, para desestabilizar el Estado con sus dichos, conductas y miserables proyectos de ajuste sobre la clase trabajadora.
Para concluir, aseguramos que nuestro sindicato ATE Mendoza y nuestra central obrera CTA Autónoma Mendoza, no convalidarán ningún recorte salarial y ajuste hacia los trabajadores, estatales y privados, como tampoco aceptaremos ninguna política que vulnere los derechos conquistados.
Para su información.