Rechazamos el proyecto del Ejecutivo sobre OSEP
El Gobierno impulsa un proyecto de ley que será tratado en comisiones legislativas durante esta semana, basado en incrementar los aportes de afiliados indirectos para sanear las cuentas deficitarias de la Obra Social de Empleados Públicos. Nuestro gremio se rehúsa a aceptar el traslado de los gastos por mala gestión hacia los trabajadores estatales.
“Pretenden que los afiliados paguemos la mala gestión política que se ha hecho en OSEP en estos años. Estamos en desacuerdo”, puntualizó al respecto Roberto Macho, secretario general de ATE Mendoza, al hacer referencia al proyecto fugaz presentado por el Poder Ejecutivo, que implica incorporar un nuevo sistema de aportes, sobre los que ya soporta la clase obrera desde hace años, mientras la casta política hace uso y desuso, según la oportunidad y la conveniencia coyuntural lo disponga.
Esta firme negativa hacia el proyecto que promueve el gobernador Rodolfo Suarez, al cual pretende otorgarle un rápido tratamiento en ambas cámaras legislativas, mantiene fundamentos consistentes centrados en tres ejes:
Primero, los aumentos no pueden recaer sobre los afiliados, afiliadas y sus respectivas familias a cargo. Los estatales son la base de una pirámide productiva que sostiene cotidianamente el funcionamiento del Estado, enfrentando serias condiciones salariales y laborales en distintos sectores de trabajo, más un conjunto de reiteradas crisis de representación política, económica y social.
La prioridad obrera en estos tiempos radica en salvaguardar la integridad de las familias, no que los políticos recarguen con costos a los azotados bolsillos de los trabajadores, que padecen una escalada inflacionaria histórica; alquileres y servicios públicos por las nubes; y el costo real de una canasta básica alimentaria, que no todos los estatales pueden llegar a cubrir mes a mes.
Segundo, las prestaciones no sirven, porque se paga en muchos casos coseguros elevados. Como si no bastara, los prestadores no aceptan la obra social, debido a la falta de pago o pagos atrasados de las prestaciones realizadas. Ni hablar del letargo existente para conseguir turnos médicos para atender distintas patologías.
Tercero, estamos de acuerdo con una obra social solidaria, pero en caso que no se pueda llevar adelante por los constantes desfasajes y la mala administración de los gobiernos de turno, requerimos que los trabajadores estatales quedemos liberados para elegir una obra social que cumpla dignamente con las necesidades que tenemos tanto nosotros como nuestras familias.
